¿Qué puede hacer mi médico?

Su médico de cabecera debe ser el primer punto de contacto en lo que respecta a su salud general. Sin embargo, si sus síntomas se centran en su salud cardíaca, es probable que lo remitan a un especialista en corazón, es decir, un cardiólogo. También se le puede derivar a un electrofisiólogo, que es un cardiólogo especializado en el tratamiento específico de los problemas del ritmo cardíaco.

 

Pruebas útiles

El primer paso es determinar si existe una causa de la fibrilación auricular. Esto se hace mediante una serie de pruebas que dependen de su estado físico.

Un electrocardiograma o «ECG» es un examen que registra la actividad eléctrica del corazón, así como su ritmo. Las pruebas de ECG son no invasivas, indoloras, se pueden realizar en el hospital o en el consultorio de su médico de cabecera y, por lo general, tardan unos cinco minutos en completarse. Se colocan pequeñas pegatinas o electrodos en los brazos, el pecho y las piernas, y el dispositivo de ECG registra el ritmo cardíaco y lo muestra como ondas en un monitor o en papel.

La monitorización cardíaca, por lo general, se lleva a cabo si se sospecha de fibrilación auricular, pero solo dura un corto período de tiempo. Se colocan cuatro pegatinas en el pecho y se conectan mediante cables a un pequeño dispositivo portátil de monitorización que se sujeta a un cinturón o a una correa para llevar al cuello. El dispositivo monitoriza la actividad cardíaca durante un período de 24 a 48 horas. En la actualidad, algunos hospitales usan un parche de ECG con pegamento impermeable puede llevarse durante 7-14 días.

La ecografía cardíaca (un ecocardiograma transtorácico o ETT) se puede usar para tomar imágenes del corazón en movimiento, a fin de observar el tamaño y la fuerza de las cámaras musculares y el funcionamiento de las válvulas. Es indolora y suele completarse en entre 15 y 20 minutos.

En algunas ocasiones, el médico puede decidir examinar el corazón con un ecocardiograma transesofágico o «ETE» al requerir una perspectiva más cercana del músculo cardíaco. Este dispositivo adopta la forma de un tubo flexible que se inserta a través de la boca y el esófago al tragarlo y utiliza ultrasonidos para producir imágenes detalladas del corazón.

Si su médico sospecha que usted padece diabetes, es posible que se le realicen análisis de sangre para detectarla. Es posible que necesite un control estricto de su presión arterial. Si ronca mucho, deja de respirar durante períodos cortos de la noche y se duerme durante el día, su médico puede prescribirle un estudio del sueño para detectar una posible apnea obstructiva del sueño. Si tiene sobrepeso, su médico puede pautarle ejercicio, dieta y regímenes de pérdida de peso.

 

Medicación

Para controlar la fibrilación auricular, se usan medicamentos, llamados antiarrítmicos, para restaurar el ritmo cardíaco natural del corazón y controlar la frecuencia a la que late. El tipo de medicamento antiarrítmico que se recomienda depende del tipo de fibrilación auricular que el paciente padezca, de la salud del corazón, de la medicación concomitante que tome y de los efectos secundarios de estos medicamentos.

 

¿Qué es una cardioversión?

La cardioversión, también conocida como cardioversión eléctrica, es un tratamiento que se utiliza para restablecer un ritmo cardíaco anormal y devolverlo a la normalidad. Solo se lleva a cabo en personas con fibrilación auricular que necesitan que su ritmo cardíaco vuelva a la normalidad lo antes posible dada su incomodidad, o porque llevan muchos días con fibrilación auricular y su ritmo cardíaco no volvería a la normalidad por sí solo. Un desfibrilador administra una descarga eléctrica a través de dos parches, uno en la parte delantera y otro en el costado o la parte posterior del pecho. Antes de administrar la descarga, el paciente recibe anestesia general o sedación intensa para no sentirla.

 

Ablación de la fibrilación auricular

La ablación es un tratamiento de la fibrilación auricular que utiliza la cauterización o la criogenización cuidadosamente dirigidas para crear deliberadamente cicatrices en las aurículas que actúan como aislantes y que previenen la propagación de los impulsos eléctricos anormales que causan el ritmo anormal. Por lo general, la ablación de la fibrilación auricular se aplica cuando los medicamentos u otros tratamientos resultan ineficaces. No obstante, en función del paciente, también se puede usar como primer tratamiento. La intervención se lleva a cabo insertando unos cables delgados, también conocidos como catéteres, en una vena de la parte superior de la pierna y conduciéndolos hasta el interior del corazón. Se tarda unas horas en hacerla y se puede realizar con anestesia local y sedación o con anestesia general. Las ablaciones se llevan a cabo en hospitales especializados por electrofisiólogos cardíacos.

 

¿Cómo prevenir los accidentes cerebrovasculares?

Un accidente cerebrovascular se produce cuando el suministro de sangre al cerebro se interrumpe o se corta por completo y las células cerebrales se dañan o mueren. Para mantener una buena salud cerebral, el cerebro requiere un flujo continuo de sangre que transporta oxígeno y nutrientes vitales.

Para reducir las posibilidades de padecer accidentes cerebrovasculares, se recomienda una combinación de práctica habitual de ejercicio, una dieta saludable, evitar fumar y la ingesta de alcohol, así como controlar otras afecciones subyacentes, como la hipertensión arterial y la diabetes.

La fibrilación auricular puede ser causa directa de accidentes cerebrovasculares. La FA puede hacer que el flujo de sangre en la aurícula izquierda se reduzca de manera que empiece a coagularse. Si se forma un coágulo que se desprende y se bombea fuera del corazón, es habitual que circule hasta llegar al cerebro, donde bloqueará una arteria y producirá un accidente cerebrovascular. En las personas con FA que corren un alto riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular, se recurre a la medicación comúnmente conocida como «anticoagulantes» para reducir ese riesgo al prevenir la formación de coágulos. Puede ser la warfarina (un antagonista de la vitamina K) o anticoagulantes orales directos (DOAC, por su sigla en inclés, también conocidos como NOAC) como el apixaban, el dabiagtran, el rivaroxaban y el edoxaban. Su médico lo valorará con la escala CHADS-VASc y decidirá si usted es un paciente de alto riesgo; a continuación, le aconsejará cuál es el mejor anticoagulante para usted.

 

¿Cómo prevenir la insuficiencia cardíaca?

En las personas con fibrilación auricular constante (la llamada FA persistente o permanente), es importante asegurarse de que la frecuencia cardíaca no se mantenga elevada también de forma constante. Su médico analizará su frecuencia cardíaca en reposo y, si es necesario, le recetará medicamentos para ralentizarla.